Tras la manifestación a favor de la vida y a la defensa de la mujer, que tuvo lugar el pasado sábado 17 de octubre en la villa de Madrid. El Santo Padre volvió una vez más a defender la vida del ser humano desde el momento de su concepción. Lo hizo desde el balcón de la basílica de San Pedro, en la ciudad del Vaticano, recordando los valores que promovió el cristianismo en Europa y por ende en el resto del mundo.
Desde la encomienda de Barcelona, recogemos sus palabras colgadas en la página de forumlibertas. Deseamos que sea de vuestro agrado.
“Europa no debe permitir que su civilización se derrumbe” dice el Papa que ve en el “individualismo” y el “utilitarismo” el gran peligro de la destrucción moral del viejo continente.
El Papa Benedicto XVI ha afirmado que los valores morales que sustentan a Europa “son fruto de una larga y sinuosa historia en la que, no se puede negar, el cristianismo ha jugado un papel primordial”. De entre esos valores el Santo Padre ha destacado “el apoyo indispensable y necesario de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural”.
El obispo de Roma ha hablado de “la búsqueda del equilibrio justo y delicado entre eficiencia económica y exigencias sociales, la salvaguarda del medio ambiente y, sobre todo, el apoyo indispensable y necesario a la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, y la familia fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer”.
El Santo Padre se ha manifestado así con motivo de la presentación de las cartas credenciales al recibir al nuevo jefe de la delegación de la Comisión de la Comunidades Europeas ante la Santa Sede, el embajador Yves Gazzo.
“La igual dignidad de todos los seres humanos, la libertad del acto de fe como raíz de las demás libertades civiles, la paz como elemento decisivo del bien común, el desarrollo humano intelectual, social y económico y el sentido de la historia que de él se deriva, son otros tantos elementos centrales de la Revelación cristiana que siguen modelando la civilización europea”, ha constatado Benedicto XVI.
Estos valores, según ha explicado el Santo Padre, “son el fruto de una larga y tortuosa historia en la cual, nadie puede negarlo, el cristianismo ha tenido un papel de primer plano” y ha afirmado que “los inmensos recursos intelectuales, culturales y económicos del continente seguirán dando fruto si siguen fecundados por la visión trascendente de la persona humana, que constituye el tesoro más precioso de la herencia europea”
Los valores cristianos y Europa
El obispo de Roma ha indicado la importancia de que “Europa no permita que su modelo de civilización se desmorone, trozo a trozo. Su impulso original –ha añadido- no debe ser sofocado por el individualismo o el utilitarismo”.
El Papa ha querido recordar su reciente viaje a la República Checa donde en su discurso pronunciado en Praga ante las autoridades y el Cuerpo Diplomático, afirmó que Europa es “más que un continente”, es una “casa espiritual”.
El Papa ha manifestado el deseo de la Iglesia de “acompañar” la construcción de la Unión Europea, “por eso se permite recordarle cuáles son los valores fundamentales y constitutivos de la sociedad europea, para que puedan ser promovidos para el bien de todos”, ha concluido.
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