Desde la encomienda de Barcelona retomamos el hilo del apartado dedicado a la magia de la flama. Debemos aclarar, que aunque decidamos darlo a conocer, ello no quiere decir que necesariamente reafirmemos su contenido; sino que creemos oportuno que los lectores de Temple Barcelona, puedan por sí mismos discernir la idea que su autor, Jake T. Shine, tiene del “poder de las velas” bajo su experiencia personal.
Queremos también decir, que esta aclaración es extensible a todos los textos que damos a conocer a los seguidores del blog, siempre aclarando de dónde proceden los mismos.
Deseamos que su contenido, lo encontréis, cuanto menos, interesante.
En la vela verde, más que poder propiamente dicho (aunque no carece de él), hay vida y movilidad, actividad y capacidad de adaptación, porque esta vela representa humildemente a
Y en esta capacidad vital de crecimiento, la vela verde nos va descubriendo como seres naturales con necesidades inmediatas, abriendo camino a la esperanza y dándonos la capacidad de construir nuestro propio mundo, nuestra propia realidad.
Lo que en otras velas es impulso o reflexión, en la vela verde es puesta en práctica, y en este movimiento entra en escena el amplio abanico del comportamiento humano.
Desde la medicina natural, hasta el comercio; desde el servicio a los demás, hasta la creatividad convertida en obra, viven bajo el influjo de la flama de la vela verde.
En la vela verde, por tanto, hay un poco de todo, tanto positivo como negativo, por lo que debemos quedarnos con lo bueno y no dejarnos arrastrar por la tentación ni el deslumbramiento de la magia que hay en todos y cada uno de nosotros. Sí, la magia verde es la magia natural, y está al alcance de todos nosotros simplemente porque ya es todo un milagro que estemos experimentando esto que llamamos vida.
En la salud
La vela verde promociona principalmente la salud natural, los remedios alternativos y los métodos poco científicos que sanan y curan, pero no por ello deja de proteger a la medicina en su sentido más tradicional. En otras palabras, la vela verde no cura como la vela azul, pero sí prepara al organismo para que se abra a nuevas posibilidades cuando lo tradicional no le funciona.
Los resultados de la vela verde son inmediatos, pero no duraderos, ya que después de operar el pequeño milagro deja en nuestras manos físicas la responsabilidad de mantenernos con bien.
La vela verde incide preferentemente en los intestinos, los pulmones, los brazos, las manos, el páncreas y la vesícula biliar, y puede ayudar a mejorar estas zonas orgánicas con su luz.
También puede alejar de nosotros ciertas obsesiones, manías, fobias y tentaciones, reordenando el desorden que solemos llevar dentro.
En suma, que el enfermo debe ir primero al médico, después prevenir y seguir el tratamiento, y, por último, encender la vela verde para que remate el proceso de una manera racional.
En el dinero
La vela verde le da movilidad al aspecto material e incide decididamente en toda clase de proyectos creativos, pero no suele dar grandes fortunas. Tiene que ver mucho con la fortuna, pero más a través de la ilusión y la esperanza que de la realidad.
Con la vela verde se le puede dar fertilidad y funcionamiento a un negocio (no son pocos los grandes comercios que se adhieren a este color), incluso cuando va muy mal o cuando todo parece estar en contra, y es que su flama es la más indicada para poner en movimiento el dinero.
Durante mucho tiempo, además, ha sido la vela de los estafadores y de los ladrones de guante blanco, así como de los políticos y de la gente que trabaja en los medios de comunicación, y es que la vela verde también incentiva la capacidad de convencimiento a través de la palabra.
Nada mejor que la flama de la vela verde para visualizar los números de la suerte, o para tener corazonadas respecto a los juegos de azar.
La vela verde ayuda a niños, hombres y mujeres por igual, pero prefiere a los que tienen más desparpajo y capacidad de adaptación a los diferentes ambientes que nos presenta la vida.
Todo lo alternativo, todo lo diferente y todo lo independiente está protegido por la vela verde en el plano material. Aunque dentro de lo tradicional también protege monetariamente a las personas que se dediquen a la medicina y la enfermería.
En el amor
Durante mucho tiempo la magia verde fue considerada la magia del amor. En otras ocasiones se le ha vinculado con la magia natural. Por estas dos razones la vela verde ayuda a conquistar los amores por medio del estómago, o por medio de los pequeños detalles y de la amistad.
La flama de la vela verde está muy vinculada a las personas que se casan dos o tres veces, así como a las que son muy paternales o muy maternales, y a las que tienen una gran capacidad generatriz, es decir, a las que tienen mucha descendencia.
La vela verde defiende más a la pareja que al amor tradicional, es decir, que no le importa quiénes formen la pareja, lo que le importa es que las personas vivan juntas y compartan sus inclinaciones.
Con la flama de la vela verde, por tanto, se le puede dar fantasía al amor y alas al corazón, así como despertar el interés en aquellas personas que nos interesan.
Por supuesto, la vela verde también incide sobre la amistad y sobre la mejora de las relaciones sociales. Incluso puede otorgar fama y popularidad.
En el plano espiritual
La vela verde incentiva la búsqueda espiritual, y nos ayuda a llenar el pequeño vacío que todos llevamos dentro, entre otras cosas, porque es una vela que promociona y aviva la esperanza de un más allá.
Meditar a la luz de la vela verde nos puede ayudar a entrar en contacto auditivo o visual con otras realidades, e incluso, en casos de alta sensibilidad, nos puede conectar con entidades de otras dimensiones o abrir las puertas del pasado, el presente o el futuro. En suma, que la vela verde es una buena compañera de los adivinos.
La vela verde, además, nos ayuda a romper con los lazos terrestres cotidianos, esos que no parecen tener importancia, pero que a veces nos atan más a la Tierra que cualquier otro lazo.
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