Bajo el Templo de Yahvé: IIª parte.

Continuamos con la segunda parte de “Bajo el Templo de Yahvé”, escrita por el investigador español Javier Sierra y publicada en su libro “En busca de la Edad de Oro”.

Esta vez nos habla del lugar donde podrían haberse custodiado las reliquias del Templo. Entre otras, el Arca de la Alianza. El tan ansiado tesoro de Salomón, siempre ha suscitado el interés de arqueólogos e historiadores, dispuestos a toda costa a intentar hallarlos.

Desde la encomienda de Barcelona, deseamos que el texto sea de vuestro agrado.

Corte trasversal del Templo de Salomón.

El recinto más sagrado

Las explicaciones del doctor Bahat en el interior del Túnel de los Asmoneos se prolongaron durante más de hora y media.

Fue él quien me narró cómo las excavaciones realizadas en este lugar desde finales del siglo pasado descubrieron una puerta antigua que, si se excavara hoy, daría paso al interior del templo y desembocaría en la mismísima Cúpula de la Roca.

También me advirtió de los problemas que sus excavaciones estaban generando en 1993. A fin de cuentas, el recinto del templo se encuentra hoy en poder de los árabes, que lo consideran el tercer lugar más sagrado de su religión. Y a éstos no les complace nada saber que al otro lado de una gruesa pared de piedra, arqueólogos judíos estaban excavando sabe Dios con qué intenciones.

-Las excavaciones del muro oeste u occidental siempre han sido muy mal vistas por los árabes –reconoce Bahat-. Además, durante muchos años ha habido personas tratando de buscar cerca de aquí toda clase de tesoros como el Arca de la Alianza.

-¿Y tienen algún sentido esas perforaciones?

-Creo que no.

-Dígame una cosa, doctor Bahat, ¿por qué el muro oeste es considerado sagrado por los judíos?

-Nosotros sabemos, gracias a las descripciones de la Mishná, que el sanctasanctórum del templo estuvo situado muy cerca de este muro. Es, por tanto, el lugar más cercano a la piedra de fundación…

-…Que fue precisamente el punto sobre el que Salomón colocó el Arca de la Alianza… -pensé para mis adentros.

La piedra de fundación a la que se refería el doctor Bahat es la Shetiyyah, una enorme masa rocosa que hoy cobija la Cúpula de la Roca, erigida en el 638 de nuestra era por el califa Omar. Los judíos creen que a su alrededor Dios creó la Tierra e hizo que sobre ella se desarrollaran acontecimientos tan importantes como la creación de Adán o el sacrificio de Isaac a manos de su padre Abraham.

Lo que reposa bajo esta roca y a su alrededor es un auténtico misterio. Su categoría de lugar sagrado impide la entrada de las piquetas de los arqueólogos, y ello pese a las innumerables leyendas que afirman que el arca de la alianza fue escondida en su seno justo antes de que Nabucodonosor arrasara el templo entre el 587 y 586 a.C.